jueves, 27 de octubre de 2011

CRÓNICA: ERNESTO RIOS ROCHA

Anny Boolking, Ernesto Rios Rocha y Benjamin Swatez
Por: Miguel de León
22 de Octubre 2010


Ernesto Ríos Rocha ha venido tres veces a Neiva y cada llegada es un recuerdo diferente. La primera vez lo hizo con otros pintores mexicanos y a la entrada del Mach se armó alguna discusión por mala información, la cosa subió de tono y uno de ellos resultó en la clínica de Emcosalud con un infarto.

El segundo viaje fue mejor organizado. Realizó un taller de mural, que dejó como recuerdo una obra en la Universidad Surcolombiana. Ahora regresa solo, pero representando a otros artistas mexicanos en una exposición en la Sala ‘Ricardo Borrero Álvarez’. Esta vez la idea es realizar un taller sobre algo que le apasiona; el autorretrato contemporáneo.

“Tengo hermosos recuerdos de Neiva y otros lugares representativos de Colombia y estoy manejando la asistencia por amistad y cariño a mis amigos de este querido país, por consiguiente estoy disfrutando la estancia en este lugar, de costumbres, para anexar a mi cultura mexicana el sabor de fortalecimiento, de relación, del arte”, me dice el maestro con su voz pausada, sin darle mayor importancia a la queja que le hago, porque no ha venido con una invitación oficial, como debería ser para alguien de su trayectoria.

Ernesto Ríos Rocha Obras

El artista con 25 años de trayectoria nació en Sinaloa, México en 1968. “Desde los 10 años empecé a pintar sin maestro, sin dirección”, recuerda, “en el camino encontré a gente que me guió, no estudié ninguna carrera, incluso no estudié pintura, yo solo he manejado mi carrera”. Cuenta con orgullo, que en la décadas de los ochentas alumno de los Fridos, es decir, con los ayudantes de Diego Rivera y Frida Kahlo; Arturo Estrada, Arturo García, Bustos y Rina Lazo y posteriormente con Enrique Estrada. Fue miembro del Jardín del Arte, fundador de la Asociación Plástica Sinaloense y del Taller Siqueiros y su obra se encuentra en los recintos públicos más importantes de su natal México.

Cuenta que su primer mural fue el que pintó en la biblioteca de la preparatoria UAS de la ciudad de Guamúchil; luego hizo el del Parque 87 y sigue enumerando, el del Ayuntamiento y de la Junta de Agua Potables y Alcantarillado de Culiacán, el de la historia del movimiento político PAN y Conafe estatal, de la Cruz de Elota y del Club Rotario y algunos más, inmerso en la tradición del muralismo mexicano. Incluso, el artista tiene un Record Guinness, al pintar un mural en el Centro de Convenciones Mazatlán International Center, el cual está catalogado como uno de los más grandes del mundo en su categoría, ya que mide 25 metros de alto por 70 de largo, con un total de 1.700 metros cuadrados.

Ernesto Rios Rocha, disfrutando de una Colombiana

“Desde pequeño me envolvió el muralismo, por la simple razón de disfrutar el intenso placer de la figuración colorida y más en un muro publico que refleja a la sociedad en acción. Me es interesante temáticamente la sociología de cada país y en este caso México que esta retratado por sus muralistas críticos al sistema político. La plástica no es el pretexto para incursionar en la sociología pero tampoco la sociología para ser pintor si no que encuentro un sabor como artista puro de temas imaginarios y poéticos y también anexando mi pensamiento personal como ciudadano de un país de problemáticas políticas y culturales”. Es talentoso, hábil con el pincel y rápido para captar la fisionomía del rostro presente, ahora anda más entusiasmado con el color y la textura, lo que da mundo lúdicos en un mar de movimiento y pigmento.

“Me complace además participar plásticamente y darme cuenta de otras personalidades y pensamientos en el quehacer de toda índole, política, artística y pensamiento literario, y lejos de esperar o querer recibir reconocimientos, honores o tales cosas para la vanidad personal, prefiero deslizarme como un ciudadano más desconocido y libre de poder analizar socialmente su cultura que me enriquece y me roba pensamiento”. Por eso a diferencia de la desunión de nuestros artistas, el maestro Ríos es amante de las asociaciones y grupo, incluso acaba de fundar un grupo bien particular, el MAI, Movimiento Artístico Internacional, una organización nacida en Mazatlán, Sinaloa, y extendida a 4 zonas del estado mexicano. Doce integrantes de la Asociación, exponen en la misma muestra del Mach.

Le pregunto por las instalaciones y demás yerbas que invaden el arte, “creo que el ser humano esencial no reside a la moda ni en los dichos de la sociedad, si no que corresponde a un deseo personal quizá de ego de lo que el intelecto le dicta por lo tanto nos es una necesidad actuar a nuestra persona”, pinta por gusto, por emoción, es su vida y la vive con la sencillez de haber realizado más de 25 exposiciones individuales y más de 120 colectivas en lugares como Colombia, Estados Unidos, Alemania y en el interior de México: Ahora, está con nosotros y su pintura se muestra en el MACH.